El tiempo estimado en el que se realiza una mamoplastia de reducción suele ser de 2 a 3 horas, bajo anestesia local, con un ingreso en clínica de 24 horas
Aunque una gran parte de las mujeres optan por un pecho voluminoso, siendo el aumento de pecho la intervención de medicina y cirugía estética más practicada en España, la mamoplastia de reducción coge fuerza en estos últimos años.
Tener un pecho grande no siempre resulta cómodo, pues, a veces, puede desembocar en dolores de espalda, cervicales, complejos… para ello la reducción de pecho soluciona este problema a muchas mujeres.
En líneas generales se refiere al conjunto de técnicas quirúrgicas que tienen como objetivo dar forma, remodelar y reconstruir la mama para reducirla conservando su morfología natural. “La exigencia de una reducción de mamas con los años ha aumentado, si hace 20 años el paciente te pedía ‘Doctor redúzcame el pecho que me molesta’ ahora el paciente te pide ‘Doctor, quiero que me reduzca el pecho pero además quiero un pecho maravilloso y fantástico que me dure toda la vida, que quede un pecho juvenil'”, especifica el doctor Iván Mañero, de IM Clinic.
¿En qué consiste esta intervención?
La mamoplastia de reducción consiste en “retirar la piel de la mama, tejido glandular y graso, a la vez que se disminuye el diámetro de la areola si su tamaño es muy grande (una areola suele medir unos 4 cm). El exceso de volumen en el pecho se suele acompañar de una caída, por ello el objetivo de esta intervención es doble: disminuir el tamaño y elevar el pecho”, explica el doctor Diego Tomás Ivancich, director de la clínica que lleva su nombre.
El tiempo estimado en el que se realiza una mamoplastia de reducción suele ser de 2 a 3 horas, bajo anestesia local, con un ingreso en clínica de 24 horas. A los dos días se le hace a la paciente la primera cura y se le coloca un sujetador especial que ha de llevar durante un mes, podrá ducharse a partir del tercer día y los puntos se retirarán en 2-3 semanas. Dependiendo del tipo de actividad profesional, el Diego Tomás Ivancich recomienda un reposo postoperatorio de 10 a 14 días, además de no cargar peso durante un mes.
En condiciones normales, las revisiones tras la operación son al mes, cada 3 meses, cada 6 meses y “a partir del año se realiza una revisión rutinaria cada año o año y medio”, afirma.
Más allá de la estética
El doctor Iván Mañero, de IM Clinic, establece que la cirugía mamaria es la más frecuente en la mujer. Aunque “la reducción de pecho no siempre es un tema estético, sino que también puede ser debido a problemas que le producen a la mujer como dolores de hombro, dolores de cervicales, el enclavamiento del sujetador en el hombro, incluso infecciones durante el verano causados por el dolor debajo del pecho”. Por tanto, es una cirugía que va más allá de la estética, “pero no por ello la paciente solo quiere quitarse el problema, pues aparte de eso, quiera quedar estupenda”.El tiempo estimado en el que se realiza una mamoplastia de reducción suele ser de 2 a 3 horas, bajo anestesia local, con un ingreso en clínica de 24 horas.
Un hecho que también recalca el doctor Pierre Nicolau, del Centre Cirugía Estética y Reparadora. “Hay pacientes que acuden a la consulta para solucionar una hipertrofia importante, es decir, de un desarrollo excesivo de las mamas”.
Como hemos avanzado, el peso puede provocar dolor de espalda o de hombro y hacer que bajar escaleras, practicar deporte o realizar cualquier actividad que suponga hacer movimientos bruscos sea un problema. Está tan ligado a la salud que Nicolau explica que “hay países en los que, si hay que quitar más de 300 gramos por pecho, los costes de la mamoplastia los asume la seguridad social, porque se considera una cuestión de salud”.
El doctor Diego Tomás Ivancich afirma que en la mamoplastia de reducción, el pecho modifica su posición, “Esto es debido a que la transformación de los tejidos hace posible que la piel se tense y, de este modo, pueda volver a sujetar los senos, que ahora tienen un peso menor.
Beneficios de esta la mamoplastia de reducción de pecho
Entre los diversos beneficios está, según Diego Tomás Ivancich, que en una operación de este tipo lo que se elimina mayormente es tejido mamario y, “cuanto menos tejido mamario exista, menos posibilidades de sufrir un cáncer de mama habrá”.
Por tanto, como vemos, los beneficios son médicos y estéticos. “El exceso de volumen determina que nuestra silueta no sea armónica o equilibrada, que son pilares de la belleza”, acentúa Ivancich. Desde el punto de vista médico, aportan tratamiento o profilaxis de los dolores de cuello y artrosis de columna a largo plazo, menor posibilidad de padecer cáncer, como hemos nombrado, al disminuir la cantidad de tejido glandular, “evitar problemas cutáneos como dermatitis que se producen por un exceso de humedad a nivel del abdomen y surco submamario, y ganar calidad de vida al mejorar nuestra movilidad”.
Elegir profesionalidad de la mano de médicos
Al ser una intervención cada vez más requerida por pacientes de diferentes edades, es importante que se incluya en el centro. “Cualquier intervención que implique pasar por el quirófano debe ser realizada por un médico especialista en cirugía plástica, estética y reparadora en un céntrico médico que disponga de todas las infraestructuras necesarias”.
Por lo tanto, “los centros de medicina estética pueden servir para visitarse con el cirujano y preparar la operación, pero no como sitio donde realizar el tratamiento”, apunta Pierre Nicolau.
Por su parte, Ivancich certifica que se debe acudir a un especialista en cirugía plástica reparadora y estética miembro de la SECPRE, como garantía de calidad y profesionalidad cuando una mujer quiere someterse a una mamoplastia.
Protocolo de actuación
En IM Clinic realizan la intervención de una forma muy específica, pues colocan un implante. Este planteamiento lo hacen en base a la siguiente idea: 1 de cada 7 u 8 mujeres a lo largo de su vida tendrán cáncer de mama, con lo cual, la mama, si bien es un órgano que se necesita para la lactancia, después de la lactancia y cuando la mujer ya no quiere tener hijos, la pregunta es, para qué sirve el pecho. “Cómo órgano, ya no tendría funcionalidad pero es muy importante su función en las relaciones personales, sociales, humanas, propias, del cuerpo y de las relaciones íntimas y sexuales. Por lo tanto es un órgano que tiene una connotación más allá de un órgano vital”, comenta el doctor.Se debe acudir a un especialista en cirugía plástica reparadora y estética miembro de la SECPRE, como garantía de calidad y profesionalidad cuando una mujer quiere someterse a una mamoplastia.
En el centro establecen que “si yo tengo que reducir el pecho porque es muy grande, ¿porque no reducirlo más de lo que lo reduciría de forma natural?, pues disminuimos el riesgo de tener cáncer de mama porque hemos eliminado la glándula mamaria y a cambio le ponemos un implante que le dé a ese pecho el volumen que queremos, la turgencia que deseamos y la durabilidad con los años y que no vuelva a caer”. Así, desde el centro consiguen que el pecho dure más de forma natural y bonita, y con los cambios de peso de la mujer, el pecho no se modificará en su forma.
Tomado de: www.beautymed.es